El retinol es un ingrediente estrella en el cuidado de la piel, conocido por sus propiedades antienvejecimiento y renovadoras. Sin embargo, muchas personas se preguntan si es seguro utilizarlo durante los meses de verano, cuando la exposición al sol es mayor.
Leer másLa Rosácea: Una Mirada Cercana a Esta Patología Cutánea
La rosácea es una condición dermatológica crónica que afecta a millones de personas en todo el mundo. A menudo confundida con el acné, esta patología se distingue por la aparición de rojez, vasos sanguíneos dilatados y lesiones cutáneas, particularmente en la parte central del rostro.
Leer másHoy vamos a hablar de un ingrediente revolucionario en el mundo de la dermocosmética: el ácido glicólico.
Este poderoso aliado de nuestra piel pertenece a la familia de los alfahidroxiácidos y es conocido por su capacidad para exfoliar y renovar la piel. Originario de fuentes naturales como la caña de azúcar, el ácido glicólico se ha convertido en un componente esencial en muchos productos de cuidado facial.
Leer másEl colágeno es una proteína esencial en la estructura de la piel, proporcionándole firmeza, elasticidad y juventud. Con el envejecimiento, la exposición al sol y otros factores, la producción de colágeno disminuye, lo que puede llevar a la aparición de arrugas, flacidez y pérdida de volumen en la piel.
Leer más¿Qué es el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es una molécula de azúcar que se encuentra de forma natural en nuestro cuerpo. Es especialmente abundante en la piel, las articulaciones y los ojos. Su capacidad para retener agua es lo que lo hace tan valioso para la salud de la piel.
El retinol es un ingrediente ampliamente reconocido en el mundo de la cosmética y el cuidado de la piel. Sus beneficios son numerosos y su eficacia ha sido respaldada por estudios científicos. A continuación, exploraremos en detalle qué es el retinol, cómo funciona y cómo puedes incorporarlo en tu rutina diaria.
Leer másLas ampollas de vitamina C se han convertido en uno de los productos estrella para el cuidado de la piel, especialmente en el rostro. Estas pequeñas dosis concentradas de vitamina C ofrecen una serie de beneficios que pueden ayudarte a mantener una piel sana, joven, luminosa y sin manchas¹. Permíteme explicarte más sobre ellas:
- Rejuvenecimiento e iluminación: Las ampollas de vitamina C son conocidas por su capacidad para rejuvenecer e iluminar la piel. Contienen una alta concentración de vitamina C, que actúa como antioxidante, reduciendo la oxidación celular y protegiendo la piel de agresiones externas. Además, la vitamina C combinada con proteoglicanos ayuda a mantener la piel estructuralmente saludable y radiante¹.
- Efecto flash inmediato: Las ampollas faciales de vitamina C proporcionan un efecto inmediato para lucir una piel más radiante. Su formato en monodosis garantiza la máxima eficacia al conservar la solución intacta hasta su apertura. Cada ampolla está diseñada para una sola aplicación, evitando la oxidación y contaminación del producto¹.
- Pieles grasas: Incluso las pieles grasas pueden beneficiarse de las ampollas de vitamina C. Los dermatólogos recomiendan optar por ampollas «oil-free» que contienen una alta concentración de vitamina C y ayudan a combatir los poros dilatados y mejorar las pieles propensas al acné¹.
El ácido hialurónico (AH) es un polisacárido natural y uno de los principales componentes de la matriz extracelular. Gracias a su alta capacidad de retención de agua (higroscopicidad), mucoadhesividad, biocompatibilidad, biodegradabilidad y ausencia de inmunogenicidad, el AH es un material atractivo para diversas aplicaciones médicas, farmacéuticas, alimentarias y cosméticas.
La capacidad higroscópica del AH se utiliza en todo tipo de cosméticos, desde sérums para el contorno de los ojos hasta barras de labios, pasando por cremas de día y noche, productos para después del sol y voluminizadores de pestañas.
Con la edad, los niveles de AH de la epidermis disminuyen drásticamente lo que conduce al aspecto más delgado y seco de la piel envejecida.
Leer másDespués del verano aparecen o se acentúan las temidas manchas de la piel. Las manchas se producen por una exposición solar excesiva o sin la fotoprotección adecuada: cantidad insuficiente y falta de reaplicación.
Existen distintos tipos de manchas y es conveniente reconocer aquellas en las que no están indicados los tratamientos de despigmentación de la piel y por tanto deben ser diagnosticadas por el médico.
La mayoría de las manchas que aparecen tras la exposición solar las podemos tratar con productos de la farmacia y obtener excelentes resultados: el melasma o cloasma en el embarazo, las pecas o eférides y las manchas post-inflamatorias provocadas por el acné o por una depilación. En todas estas manchas se produce un aumento del pigmento llamado melanina.
Leer más